EDITORIAL11 de marzo de 2009
El Salvador tiene una extensión territorial de más o menos 21,000 kilómetros cuadrados y dicen por allí que es del mismo tamaño que el Estado de Massachusetts de los Estados Unidos de Norte América.
Aunque ahora El Salvador es quizás un chilin más pequeño en territorio por eso de tener gobiernos atrevidos y sin visión hasta el punto de meterse a pelear con su vecino y país hermano… Honduras.
Lo que hasta ahora caben en ese pequeño país conocido como “el Pulgarcito de América” son aproximadamente 6 millones de hombres, mujeres y niños.
Así como ocurre en todos los países capitalistas o colonizados, El Salvador cuenta con una extrema riqueza acumulada en pocas manos y una extrema pobreza distribuida casi equitativamente en la gran mayoría de salvadoreños y salvadoreñas.
Al igual que en países capitalistas y colonizados, El Salvador cuenta con una sobre explotación y mal uso de los recursos naturales, intolerancia y persecución política, un sistema estructural de gobierno caduco; robos, secuestros, criminalidad, extorsión, malversación de fondos, corrupción, discriminación, contaminación, prostitución, trafico de drogas y porque no, de seres humanos.
De acuerdo al sitio Web www.elsalvadorebelde.org en su editorial “El legado de ARENA – La Crisis Económicas si es Consecuencia de sus Políticas”, plantea que “en 20 años de gobierno, el partido – ARENA - ha llevado a El Salvador a datos alarmantes, siendo nuestro territorio casi tan peligroso y violento como vivir en Irak, país que vive una intervención directa, y que ha empujado e una guerra interna sangrienta.
El editorial presenta los siguientes datos:
Hasta el 2007, habían emigrado desde El Salvador unos 2, 373,444 personas, lo que equivale a un 40% del total de la población.
Sólo en ese mismo período fueron asesinadas aproximadamente unas 75,483 personas. Eso es más que los muertos que la guerra civil dejara entre 1975 a 1991.
La venta de capital en bancos a manos extranjeras asciende a un promedio de cerca de 5 billones de dólares. Lo que significa que ahora todos los bancos más grandes de ese “Pulgarcito” son controlados por capital extranjero.
La corrupción por un monto de mas de 3 billones de dólares, lo que es mucho más superior a los casi 3 millones de dólares del Presupuesto Nacional para el año 2007
Más de 11 proyectos de corporaciones internacionales, dejando salarios bajos y una fuga de capital que equivale al 98% del ingreso de la nación.
Más de 7 años de inseguridad alimentaria derivada de la aplicación del Plan de Ajuste Estructural y la destrucción del agro
Más de 460,000 armas circulantes y de ellas un 60% son ilegales
Más de $13, 462,078 dólares utilizados en campañas electorales solo del 2003 a la fecha.
Los 20 años que el gobierno de ARENA ha dejado en El Salvador son problemas catastróficos graves, como son los problemas de salud, vivienda, alimentación, educación, seguridad ciudadana, seguridad laboral, unión familiar y emigración entre otros.
Pero… ¿Cambiará esta historia de luto, miseria y hambre a la que ha sido sometido este “Pulgarcito de América”?
La historia de lucha de ese pueblo laborioso y digno indica que el estado de cosas cambiará.
Y es que en ese país tan pequeño de mas o menos 21, 000 kilómetros cuadrados, también caben millones de seres humanos que se han negado a vivir de rodillas; hombres, mujeres y niños que han luchado y que siguen luchando por un mundo mejor; un mundo con justicia social, un mundo con dignidad.
Ese pueblo bravo – El Salvador – ya lo ha demostrado en un sinnúmero de veces, empezando con las luchas de los Pipiles en contra de las invasiones europeas en 1524
El levantamiento indígena de 1832 liderado por Anastasio Aquino en contra del imperio español.
El levantamiento campesino de 1932 liderado entre otros y otras por Agustín Farabundo Martí en contra del presidente del régimen militar de Maximiliano Hernández Martínez y apoyado por el imperio Yankee.
Y más recientemente, en la década de los ochentas, los levantamientos de obreros, campesinos, estudiantes y profesionales en uno de los movimientos guerrilleros más sofisticados en el mundo, ahí mismo en el patio trasero de los Estados Unidos, surge el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional.
Es a partir de todas esas invasiones, represiones, traiciones y opresiones, que este pueblo humilde pero valiente, viene dando la pelea.
El Salvador, hoy en pleno siglo 21 se enfrenta ante una maquinaria multimillonaria dirigida por un gobierno lacayo que sigue sometido al imperialismo norteamericano.
Ahora, El Salvador se encuentra al frente de un cambio sin precedentes, donde se ve la posibilidad de que finalmente elija a un nuevo gobierno nacional; justo y honesto que se encargue de administrar en función del pueblo y no de las transnacionales la cosa pública. Un gobierno que de verdad tenga sentido humano, que abogue por las y los desposeídos, que de verdad ayude a ese pueblo a sacarlo de la extrema pobreza a la que sido sometido.
Ya, ese pueblo valiente ha iniciado con el voto popular a cambiar a sus gobernantes, en las elecciones del pasado 18 de enero ganó 35 diputados y 95 alcaldías.
Ahora ese mismo pueblo se prepara nuevamente para depositar su voto y cuidar las urnas en las elecciones presidenciales que se avecinan para este próximo 15 de marzo de 2009. Elecciones que según encuestas generales le dan la victoria al candidato Mauricio Funes y Salvador Sánchez Ceren por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, por sus siglas FMLN.
Ojala y El Salvador se una de una vez por todas al movimiento de liberación latinoamericano y que lleva en sus puños como insignia la espada de Bolívar.
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